alamar

HIJOS DEL AGOBIO

Era 1971 y Cuba padecía graves problemas de vivienda. Alamar fue la ciudad elegida para albergar a miles de trabajadores dentro de un ambicioso plan: convertir la ciudad en el hogar hombre nuevo de la Revolución en la flamante sociedad comunista. Construida por sus propios moradores, en cuatro años ya se había convertido en una ciudad modelo.

Mientras, el comunismo seguía expandiéndose y la Unión Soviética debía regar sus semillas por el mundo. Cuba florecía como nunca y era momento de vender al mundo sus logros. A finales de los ochenta, Fidel Castro inauguró en Alamar la piscina más grande de latinoamerica.

Cinco mil metros cuadrados de granito y dos metros de profundidad acompañada de cafeterías, restaurante y discoteca. El complejo se convirtió en uno de los símbolos de los años dorados del comunismo cubano.

 Pero nada dura para siempre y en Cuba eso se aprendió en los años noventa cuando la Unión Soviética colapsó. Desde entonces, la piscina gigante de Alamar ha pasado a ser símbolo de la decadencia del comunismo.  

Grietas, maleza y escombros son ahora el paisaje que habita el interior. Sin embargo, un grupo de jóvenes ha decidido comenzar allí su pequeña Revolución. Una revolución contra el aburrimiento, la frustración y la falta de expectativas ante el futuro.

Publicación

alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar
alamar

¿Estás interesado en publicar o exponer este proyecto y verlo completo?